Traduce esta página web a tu idioma - Translate this website into your language - Traduire ce site dans votre langue - Tradurre questo sito nella tua lingua - Traduzir este site para o seu idioma - Transferre hoc website in lingua - Vertaal hierdie webwerf in jou taal - Übersetzen Sie diese Website in Ihre Sprache - Tradueix aquesta pàgina a la teva llengua -
English French German Spain Italian Dutch Russian Portuguese Japanese Korean Arabic Chinese Simplified
***** BENDICE NUESTRO MINISTERIO DE AYUDA ESPIRITUAL GRATUITA EN INTERNET Y TU VIDA SERA BENDECIDA.

NUESTROS SERVICIOS

*** BIENVENIDO/A A LA PAGINA WEB DE AYUDA ESPIRITUAL GRATIS POR INTERNET ***
¿De qué se trata?
Es un servicio de aconsejamiento espiritual. Usted puede contarnos su problema y nosotros le aconsejamos desde una perspectiva humano cristiana para que pueda solucionarlos. Su consulta se trata con absoluta reserva. Cientos de personas en todo el mundo nos han consultado y han agradecido la ayuda suministrada. Nuestra visión es de reino, esto quiere decir que nos gustaría que usted pueda asistir a nuestra iglesia, crecer espiritualmente y recibir grandes bendiciones de Dios, pero también nos alegra que usted pueda ser bendecida y desarrollarse en su vida, en su entorno social, en su ciudad y ser feliz.
Las áreas de consulta son muchísimas, usted puede consultarnos sobre relaciones familiares, sobre su vida existencial, su relación social, su trabajo, la vida espiritual, sobre el futuro del hombre según la Biblia, sobre problemas matrimoniales, vicios, drogadicción, soledad, etc.
Estamos dispuestos a aconsejarle espiritualmente, orar a Dios por su vida junto con otras personas, orientarle y asesorarle cristianamente, enviarle información de aliento para su vida existencial, mantener una amistad verdadera, y acompañarle en los momentos difíciles. Para que de esta manera usted pueda desarrollar todo su potencial a favor suyo y a favor de los demás.

UN DIA HABLE CON DIOS


UN DIA HABLE CON DIOS


Un día, temprano por la mañana, me levanté para observar la salida del Sol.

¡Oh, la belleza de la Creación de Dios queda más allá de la descripción!

Mientras observaba, alababa a Dios por su bella obra.

Mientras estaba sentado ahí, sentí la presencia del Señor conmigo.

Entonces, El me preguntó, “¿Me amas?”
Yo contesté, “¡Por supuesto, Dios!
¡Tú eres mi Señor y Salvador!”

Entonces me preguntó “Si estuvieras físicamente incapacitado, ¿aún me amarías?”

Me quedé perplejo, baje la mirada, me quede unos minutos en silencio.
Y contesté, “Sería difícil, Señor, pero aún así te amaría”

Entonces el Señor dijo, “Si estuvieras ciego, ¿amarías aún mi creación?”.

¡Cómo podría amar algo, sin poder verlo!
Entonces pensé en las personas ciegas que aún aman a Dios y a su Creación.
Así que contesté, “Es difícil pensarlo, pero aún te amaría.”

El Señor entonces me preguntó, “Si fueses sordo, ¿oirías mi Palabra?”.

¿Cómo podría oír algo siendo sordo? Entonces comprendí.
Escuchar la Palabra de Dios no es solamente usar nuestros oídos, sino nuestros corazones.
Contesté, “Sería difícil, pero aún oiría tu Palabra”.

El Señor entonces preguntó, “Si estuvieses mudo, ¿alabarías aún mi Nombre?”.

¡Pero cómo puedo alabar sin voz! Entonces pensé que Dios desea que le cantemos desde nuestro corazón.
Entonces contesté, “Aunque no pudiera cantarte físicamente, alabaría aún tu Nombre”.

Y el Señor preguntó, “¿En realidad me amas?”

Con valor y profunda convicción, le contesté,
“¡Sí Señor! ¡Te amo por que Tú eres el Dios único y verdadero!”

Pensé que había contestado correctamente, pero Dios preguntó, “¿ENTONCES PORQUE PECAS?”

Contesté, “¡Porque soy sólo un ser humano y no soy perfecto!”

“ENTONCES, ¿PORQUE EN TIEMPOS DE PAZ TE DESCARRIAS TAN LEJOS DE MI?
¿PORQUE SOLO EN TIEMPOS DE ANGUSTIA ORAS SINCERAMENTE?”

No hubo respuestas. Sólo lágrimas.

El Señor continuó, “¿Por qué solamente cantas en la iglesia? ¿Por qué me buscas sólo en tiempos de necesidad? ¿Por qué pides

cosas tan egoístas? ¿Por qué pides sin tener fe?”

Las lágrimas, continuaron rodando sobre mis mejillas.

“¿Porqué te avergüenzas de mí? ¿Porqué no estás esparciendo las buenas nuevas? ¿Porqué en tiempos difíciles, lloras con otros cuando te ofrezco mi hombro para que lo hagas? ¿Porqué pones pretextos cuando te doy la oportunidad de servir en Mi Nombre?”
Intenté contestar, pero no hubo respuesta que dar.

“Eres bendecido con la vida. No te hice para que desperdiciaras este regalo. Te he bendecido con talentos para servirme, pero continúas dándome la espalda. Te he revelado mi Palabra, pero no obtienes el conocimiento de ella. Te he hablado pero tus oídos estaban cerrados. Te he mostrado mis bendiciones, pero tus ojos nunca las vieron. Te he mandado mis siervos, pero permaneciste sentado inmóvil mientras ellos eran rechazados. He oído tus oraciones y las he contestado todas.”

“¿En verdad me amas?”

No podía contestar. ¿Cómo podría hacerlo? Estaba increíblemente apenado. No tuve excusa. ¿Qué podía decir?
Cuando mi corazón hubo llorado y las lágrimas habían fluido, dije “¡Por favor perdóname Señor! ¡Soy indigno de ser tu hijo!”

El Señor contestó, “Esa es mi Gracia, mi Hijo”
“¿Entonces porqué continúas perdonándome? ¿Porqué me amas tanto?”

El Señor contestó:
“Por que tú eres mi creación. Tú eres mi hijo.
Nunca te abandonaré.
Cuando llores, tendré compasión y lloraré contigo.
Cuando estés gozoso, me alegraré contigo.
Cuando estés deprimido, te animaré.
Cuando caigas, te levantaré.
Cuando te sientas cansado, te llevaré sobre mis hombros.
Estaré contigo hasta el fin de los días, y te amaré por siempre.”

Nunca antes había llorado como en ese momento. ¡Cómo pude haber sido tan frío! ¡Cómo pude lastimar a Dios con todo lo que hice! Le pregunté a Dios, “¿Cuánto me amas?”
El Señor me estrechó en sus brazos, y contemplé su Amor, su Gracia y su Misericordia.

"Entonces, cuando habían acabado de desayunar, Jesús dijo a Simón Pedro: Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que éstos? Pedro le dijo: Sí, Señor, tú sabes que te quiero. Jesús le dijo: Apacienta mis corderos.Y volvió a decirle por segunda vez: Simón, hijo de Juan, ¿me amas? Pedro le dijo: Sí, Señor, tú sabes que te quiero. Jesús le dijo: Pastorea mis ovejas.
Le dijo por tercera vez: Simón, hijo de Juan, ¿me quieres? Pedro se entristeció porque la tercera vez le dijo: ¿Me quieres? Y le respondió: Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te quiero. Jesús le dijo: Apacienta mis ovejas." La Biblia, Nuevo Testamento, San Juan 21:15-17.


Con afirmación y descanso.

Marcelo y Graciela.

No hay comentarios:

************** MENSAJES ANTERIORES **************

Si te somos de bendición, ofrenda a este ministerio de consejería y evangelístico,

Si te somos de bendición, ofrenda a este ministerio de consejería y evangelístico,
para que llevemos la palabra de salvación a todas las personas.

Hola Amigo/a!!! Bienvenido/a!!! soy AEG

Hola Amigo/a!!! Bienvenido/a!!! soy AEG
Estos libros te pueden ayudar

** LIBROS VIRTUALES, INTERACTIVOS PARA PC, GRATUITOS, NO IMPRESOS, DESCARGABLES DE INTERNET.

RECIBE NUESTROS MENSAJES POR EMAIL

RECIBE NUESTROS MENSAJES POR EMAIL
RECIBE NUESTROS MENSAJES POR EMAIL

************** SUSCRIBITE A NUESTROS MENSAJES DE ALIENTO SEMANAL **************

Ingresa tu dirección de email:

Delivered by FeedBurner

***** Ayúdanos a seguir adelante dejando algún comentario o adquiriendo nuestros libros virtuales. De esta manera, nos harás saber que te somos de bendición y que nuestro trabajo en el Señor no es en vano. Gracias. *****

*** ENVIA TU CONSULTA O PEDIDO DE ORACION, GRATUITO DE AYUDA ESPIRITUAL ***

Coméntanos tu situación

.

.

** INGRESA CON TU FAMILIA AL REINO DE LOS CIELOS A TRAVES DE ESTA ORACION: **

Haz esta oración y sé salvo y sano espiritualmente:

Repite con nosotros:

Padre y Dios mío, vengo a ti, no puedo más, estoy tan cansado/a, me siento mal, tengo mil problemas, te necesito, ayúdame por favor, creo en tí, aunque no te vea o no te sienta, perdóname por mis pecados, me arrepiento por estar lejos de ti, te pido que me perdones, a través de tu Hijo Jesucristo, lo recibo a él en mi corazón, entra Jesús en mi, tu eres mi salvador, hazme una nueva persona, lléname de tu Espíritu Santo, de tu Palabra, de tu bendición, cámbiame, mejora mi vida, mi familia, mi economía, por favor te lo pido, ten piedad de mi oh Dios, yo te doy gracias, te alabo y te bendigo, y te daré toda la gloria, la honra y la alabanza. Amén.


Ayúdanos con tu ofrenda de amor

Visitas en el día

religion y espiritualidad